Como cada vez son más las escuelas que incluyen pernoctaciones en sus excursiones escolares, la calidad de la experiencia variará mucho dependiendo de si el destino es la "isla principal" o una "isla remota" de Okinawa. Si lo que se busca es un "aprendizaje profundo", entonces hay que elegir la isla de Izena. A diferencia de la isla principal, que se ha convertido en un destino turístico, la isla de Izena ofrece un entorno en el que se puede aprender adentrándose en la propia vida local y entablando relaciones con la gente. La experiencia de pernoctar en Izenajima hace posible que todos y cada uno de los estudiantes "conozcan a alguien, piensen por sí mismos y actúen".
difícil de encontrar en la isla principal de Okinawa
El "aprendizaje relacional" existe en la isla de Izena.
Las casas de familia en la isla principal de Okinawa tienden a ser a gran escala y orientadas al turismo, y en muchos casos se centran en la interacción entre estudiantes. En la isla de Izena, en cambio, el concepto básico es acoger a un número reducido de personas en cada hogar. La proximidad con los anfitriones crea muchas oportunidades para el diálogo en profundidad y la acción en el curso de la vida diaria. Esto produce de forma natural un "aprendizaje relacional" en el que los estudiantes descubren el significado de su propia existencia dentro de la comunidad local.
Porque no está "programado".
Es una experiencia que fomenta la independencia
Una estancia residencial en una isla remota no es sólo un viaje en el que sigues el programa. Participarás en la vida real del momento, por ejemplo, organizando el trabajo en la granja, preparando comidas y ayudando en casa. En otras palabras, se trata de un entorno que requiere "la capacidad de moverse por su cuenta en un campo imprevisible" más que un aprendizaje planificado. Se trata de una experiencia real que fomenta un 'entusiasmo por la vida' que no puede adquirirse en los viajes urbanos.
Ojalá pudiera quedarme aquí más tiempo".
Prueba de la unicidad de las islas
Muchos estudiantes, tras pasar la noche en la isla de Izena, dicen que no quieren irse y que quieren volver. Es la prueba de que han adquirido una "experiencia relevante" que no puede vivirse haciendo turismo. El aprendizaje en profundidad no empieza con la adquisición de conocimientos, sino con experiencias que conmueven el corazón. La isla de Izena es un lugar donde esto sucede de forma natural.