¿Cree que el alojamiento privado es igual en todas partes?
Pero en realidad, los maestros de escuela se toman muy en serio la elección del lugar donde alojarse. En este contexto, la isla de Izena es ahora un destino de alojamiento privado que poco a poco se está haciendo cada vez más popular en Okinawa. No es un destino turístico ni el más accesible.
Colegios de todo el país nos han dicho que son "felices aquí" y que "quieren volver". Hay una buena razón para ello.
Una isla cálida y acogedora con la distancia justa de la gente
La razón por la que el alojamiento privado en la isla de Izena es tan popular es porque "la facilidad para entablar relaciones con la gente" es exquisita. Los anfitriones son muy amables, pero no se insinúan demasiado desde el principio. Observan suavemente a los estudiantes y les hablan cuando es el momento adecuado. Este sentido natural de la distancia conduce a una sensación de seguridad, y antes de que te des cuenta, te encuentras sonriendo cada vez más. En la isla de Izena se respira un ambiente en el que incluso los estudiantes "poco sociables" pueden abrirse.
¡Fue divertido intentarlo! Las "historias de éxito" hacen avanzar a los estudiantes.
Los alumnos, que al principio estaban un poco nerviosos, se encontraron naturalmente con momentos de "¡lo he conseguido!" mientras cocinaban y ayudaban a limpiar el huerto. momentos. Cuando los anfitriones dicen "Gracias" o "Me has ayudado", les queda la sensación de haber "ayudado a alguien".
Esta pequeña experiencia de éxito refuerza la confianza de los estudiantes. Este es un elemento importante de la estancia residencial como viaje educativo, y la razón por la que la isla de Izena lo apoya tan bien.
Como la experiencia cultural es "real", llega fácilmente a la mente.
Las experiencias culturales de la isla de Izena no son las llamadas "para el turismo". El sonido del sanshin (instrumento de tres cuerdas) y la cocina local forman parte de un modo de vida arraigado en la comunidad local. Por eso no sientes que te obliguen a nada. Por ejemplo, un anciano que toca el sanshin podría decirte: "Solíamos tocar esto en las celebraciones de la isla". Como hay una "historia" en la experiencia, los alumnos pueden entenderla fácilmente.
No hay muchas experiencias que te hagan decir: "Quiero volver".
Tras completar su estancia residencial en la isla de Izena, los estudiantes suelen decir: "Quiero volver" y "La próxima vez quiero venir con mi familia".
Creo que no es sólo porque haya sido un viaje divertido, sino también porque siento que 'tengo un lugar al que pertenezco'. Se establecen conexiones con la gente, alguien se alegra de algo que has hecho, y todo esto lleva a 'quiero volver a verte'. No hay muchas experiencias así. Por eso se sigue eligiendo la isla de Izena.